
“Comer macetas está de moda.”
Pues parece que no. Lo que está de moda —y desde hace muy poco— es comer tanta carne. Durante casi toda la historia, las sociedades humanas vivieron con dietas basadas en plantas: arroz, legumbres, cereales, verduras y frutas. Comer carne a diario es una costumbre reciente, nacida con la industrialización y la expansión colonial.
En Japón, India, Etiopía o Europa, millones de personas pasaron siglos sin comer animales… por ética, por respeto, por cultura o, simplemente, porque no era necesario.
Japón: más de 1.000 años sin carne
Desde el año 675 d.C. hasta 1872, la carne estuvo prohibida por ley.
El budismo y el sintoísmo promovían el respeto a los animales, y la dieta japonesa se basaba en arroz, legumbres, verduras y algas.
Fue el emperador Meiji quien rompió el tabú al comer carne por primera vez en público como símbolo de “modernización”.
India: la no violencia como norma
El principio de ahimsa —no hacer daño a ningún ser sintiente— guió la alimentación durante siglos.
El jainismo y el hinduismo mantuvieron dietas vegetarianas o veganas desde hace más de 2.500 años.
Las legumbres son el corazón de la cocina india tradicional.
Europa: la carne era un lujo
Durante siglos, las clases populares apenas comían carne.
La Iglesia imponía ayunos y abstinencias casi la mitad del año, y muchas órdenes monásticas eran vegetarianas.
La carne se convirtió en símbolo de estatus solo tras la Revolución Industrial.
África y Oriente Medio: moderación y respeto
En Etiopía, la Iglesia ortodoxa prohíbe la carne y los lácteos más de 200 días al año.
En el Islam, el sacrificio debe realizarse con compasión y agradecimiento.
En regiones áridas, la carne siempre fue un lujo excepcional.
América precolombina: civilizaciones basadas en plantas
Antes de la colonización, las principales culturas (mayas, mexicas, incas…) se alimentaban de maíz, frijoles, calabaza, patata, quinoa y frutas.
La caza existía, pero no era la base de la dieta.
Conclusión: un mito moderno
Durante casi toda la historia, la humanidad comió sobre todo plantas.
La carne diaria es un fenómeno moderno, nacido con la industrialización y la colonización. se inventaron formas de producir carne en masa encerrando a millones de animales en naves sin luz, sin espacio y sin aire limpio. Esa violencia permitió algo impensable:
que la carne fuera barata. A costa de los animales, del planeta y también de nuestra salud.
Con cabeza y coarzón.
Donna Ratier-Kimberley



